jueves, 12 de marzo de 2009

El fanatismo…

Las cosas siempre le llegan a uno cuando no se lo espera…

Ayer, me fui hasta el Teatro Balboa, a ver la final de un programa que dan aquí en Panamá, donde concursan niños cantantes para elegir uno, el mejor. Mi única finalidad era ver a Noel Schajris, el integrante de Sin Bandera, que iba a estar como artista invitado y jurado.

La vida a veces es cruel… Dios sabe lo que me ha dolido esto. Les puedo comentar que sufro de lo que comúnmente denominaríamos “fanatismo”. Es algo que no le deseo ni a mi peor enemigo. Saber que la persona a la que tú admiras con todas tus fuerzas te decepciona… es algo horrible.

Pero no quiero sonar deprimente, ¡quiero reírme de esto! Imagínense, cada vez que voy a uno de los malls de Panamá, llevo mis CD’s en la cartera, junto con mi cámara fotográfica y una pluma. TRISTE!

Cada vez que entro en las Farmacias Arrocha de Calle 50, miro a todos lados, buscando a un rubio, y sé que hasta parezco prófuga de la justicia. TRISTE!

Ayer, me aguanté 6 horas de pie, sólo esperando el momento para poder conocerlo. TRISTE!

Y les hablo a ustedes de que soy madura. Cuento! Esto es lo más infantil que he hecho en mi vida. Pero creo que lo volvería a hacer de nuevo.

Mi papá se la ha pasado todo el día molestando: “Hey, ¿entonces ya sabes lo que sintió el asesino de John Lennon?” o “¿Y saludaste a Gwendolyn (la esposa de Noel)?”. Es divertido cuando anda de buen humor: siempre que vamos por la calle, me señala a un tipo cualquiera y me dice: “Anda pídele un autógrafo”.

Para cambiarles un poco el tema medio deprimente, les cuento que tuve una conversación de lo más interesante con uno de los que atiende el teléfono en la empresa IDAAN en Panamá, que es la que se encarga de los asuntos aguatinos del país (no pregunten):

-Idaan, buenas!

-Buenos días, les hablo de … (lugar donde vivo; no quiero que, por si acaso, mi stalker personal encuentre mi casa) porque no hay agua desde hace una hora.

-¿De verdad? No tenemos información sobre eso. Oye, Manuel, ¿hay agua en …?

(A todo esto, Manny le responde por allá atrás: Sí, si hay, ¿por qué?)

(Es que dice una joven que no hay.)

(Bueno, no sé nada de eso, debe haber.)

-Dicen que no hay problemas con el suministro de agua en…

-No me diga! Pues yo no tengo!

-Umm, que raro!

-¿Va a poner la denuncia o no? (a estas alturas, ya me había cabreado con eso de que me llamaron mentirosa; no tengo agua y, además, mi palabra vale mierda).

-Ah, sí, claro, como no…

Termina la llamada. Una hora después llamó de nuevo:

-Idaan, buenas!

-Si, mire, le hablo de … de nuevo, quisiera saber si ya hicieron la reparación.

-Si, si, si, estamos en eso (Como si él fuera el que está matándose bajo el sol panameño arreglando una tubería).

-¿Y cuándo regresaría el agua?

-Más tarde.

-¿Más tarde? ¿Cómo cuando?

-Más tarde.

-Claro, como no es la de su casa!

-…

Regresó 20 minutos más tarde. Ya ven ustedes, la concepción del tiempo en las personas varía por la edad, el sexo, la altura de la persona y el peso.

También, volviendo otra vez a la parte de la muerte, que últimamente me rodea mucho, el otro día en la noche me di cuenta que tengo un power supply iraquí (parte en el interior de la CPU de la que no tengo ni la puta idea de qué es; solo créanme, queda adentro de la CPU). El término no me lo adjudico a mí, lo dijo un amigo mío (si, Isaac, tú) pero no ha habido nada más cierto en años. La cosa (la CPU) empezó a SONAR! sonar, en serio, como un silbido salía de allí dentro. Eran las 11:30 de la noche, y yo tenía un miedo de que esa vaina fuera a prender la casa. Pensé en dónde guardo mi dinero y me dije: “¿Lo guardo en mi maleta rosada o en la negra?”. Definitivamente estaba mal, porque no hay nada de malo pensar que, solo a segundos de que se incendie tu hogar, tú tengas que decidir con cuál maleta quedarte. Tuve mucho miedo; nunca en mi vida había escuchado un sonido tan penetrante salir de algo tan chico con una CPU.

Entonces fue cuando me acordé del power supply iraquí; segurito que los gringos encontraron una manera de iniciar el caos en nuestro país, he instalaron un arma poderosa de destrucción masiva en mi computadora mientras yo estaba en la Universidad. ¡Qué olas gigantes ni qué carajo! Un power supply asesino es más efectivo que todas esas muertes que me imaginé.

Y así es como los estadounidenses conspiran para acabar con mi vida y yo aquí, burlándome de ella.

Bye!

P.D.: Sorry por el tiempo que no estuve por aquí!

*Astrid A.*

2 comentarios:

Kathy dijo...

Astrid Dios mio..que vamos a hacer contigo ...me he muerto de la risa con lo de tu cpu jijiji....

*Astrid A.* dijo...

hey man, en serio! estaba leyendo un libro en la PC, y arreglando mis documentos, cuando esa vaina empezó a sonar!! casi me da un patatus! yo solo me preguntaba: ¿¿Y ahora que hago???